martes, 27 de abril de 2010

Vale, juguemos a las contradicciones.


Me encanta la soledad  pero soy adicta a los abrazos.
Me gusta ser camaleónica pero tú, entramé de frente y con una sola cara. 
Muero sin risas diarias, pero recomiendo llorar.
Me chifla comer y sin embargo odio cocinar.
Viviría viajando cada semana, y detesto hacer maletas.
Me gustan las sensaciones fuertes pero lloro con el picante.
Adoro la noche, pero muero sin el sol.
No soporto las miradas altivas, pero chulearte…me pone.

¿Y tu qué? ¿tienes a todos tus yos de acuerdo?



viernes, 23 de abril de 2010

Reseteándome




La vida gira, todo se mueve a mí alrededor, las cosas, las emociones, los trabajos, la gente, las formas, todo cambia, y ya empiezo a correr riesgo de sufrir mareos si esto no frena un poco.
Y yo para ayudar, en vez de estar quietecita, voy y vengo, corro, salto, grito, paro, busco.
Debe ser como eso de "el dinero llama al dinero", pues aquí los cambios llaman a los cambios, todo esto hace que yo también me mueva, si todo lo que tenía alrededor cambia de sitio, yo necesito volver a ubicarme, buscar mi entorno, resetearme, reencontrarme…
¿Sabéis eso de que pare el mundo que me bajo? Pues eso.
Claro que…¿Cuál es mi parada?

…estoy en ello.


martes, 20 de abril de 2010

Nada.


Nada es lo que parece, dicen.
Estoy más que harta de oír esa frase.
Todo es lo que es.
Lo que es nada, es lo que la gente se molesta.
Nada es lo que gastan algunos de su tiempo,
y toda es la desgana de observar,
de parar.

Nada es siempre como uno quiere que sea.

¿Pero que algo se convierta en nada porque nadie ve?



jueves, 8 de abril de 2010

ANDAR O PARAR

-¿voy o no voy?


-¿qué tienes que perder?


-perder puede que nada, pero si ganar sensaciones feas, y eso ya me cansa. Si no percibo algo lindo con claridad, no me moveré.


-no es mal criterio, sólo hay un pequeño problema, la seguridad  al cien por cien ...no existe.



martes, 6 de abril de 2010

No te olvides…




no te olvides de que tú eres siempre tú,
pase lo que pase, ocurra lo que ocurra, las circunstancias son sólo eso,
las circunstancias no son tú,
ni siquiera se parecen a ti.
Y mucho menos te pueden cambiar, como mucho te tambalean.
Y si el tambaleo es muy fuerte agárrate a quién eres,
sin olvidar que si los demás no perciben tus cualidades, sólo es eso,
que no lo perciben,tus cualidades siguen, pero es posible,
que si solo escuchas lo ajeno, ahora mismo las tengas dormidas.
Agárrate y recupéralas.
Si haces algo que te hace sentir mal, no está mal toda tu vida,
sólo ese algo, el resto, aunque no lo creas,
quiere seguir viviendo.
Permíteselo.
Cuando te rompen el corazón,
el corazón sigue latiendo, aunque no lo sientas.
No le castigues más.

Cuando sientas que el mundo está en tu contra,
acércate más, eras tú el que estaba lejos…de ti.

Cuídate de ti mismo.
Sé tu mejor amigo.

No hay otra manera de recuperar el equilibrio.